ZARPAZO
CONTRA LAS REGIONES
ESCRIBE: JORGE MANCO ZACONETTI (Investigador UNMSM)
Aprovechando
las múltiples denuncias sobre el mal uso de los recursos del canon minero, resaltando
en la gran prensa los indicios razonables de corrupción por parte de altos
funcionarios públicos en algunos gobiernos regionales y locales, destacando la
falta de transparencia en el uso de los recursos del canon que se distribuye anualmente,
el gobierno del Presidente Ollanta Humala ha recortado en más de 886 millones
de nuevos soles el canon minero para el período julio 2014 / junio 2015, en
relación al distribuido en el 2013.
El recorte
del canon minero equivale a una disminución promedio del 23.22 por ciento,
pasando de los 3,817 millones de nuevos soles a 2,930 millones para el período
julio 2014 a junio del 2015, canon que tiene como base el impuesto a la renta
abonado por las empresas mineras en el ejercicio fiscal 2013, el mismo que se
regulariza en el pago en el mes de abril de cada año.
Ello
significa un fuerte recorte al financiamiento de los diversos proyectos de
inversión en las regiones, provocando un grave malestar en la población rural y
urbana en los departamentos mineros lo cual podría estimular mayores conflictos
sociales, los mismos que se agudizarán en vísperas de las próximas elecciones
regionales.
Si se
tiene presente que el canon minero constituye la más importante transferencia
que perciben los gobiernos locales y regionales por la explotación de los
recursos mineros no renovables, debiera ser evidente la gravedad del problema
que se encubre y minimiza ante los escándalos de corrupción, detenciones,
acusaciones de la fiscalía, donde el gobierno regional de Ancash bajo
responsabilidad del señor César Álvarez hasta no hace mucho tiempo era el
engreído del gobierno, se constituye en la expresión más perversa y negativa
sobre sobre el uso de tan importante recurso.
El canon
minero distribuido para el período julio 2014 hasta junio 2015 ha sumado los
2,931 millones de nuevos soles, que resulta inferior al canon del 2013 donde se
alcanzaron los 3,817 millones, y mucho menor a las cifras distribuidas en el
2012 que llegaron al pico de los 5,124 millones de nuevos soles, como se podrá
observar en el cuadro respectivo “Canon Minero en Nuevos Soles”.
Es decir,
el canon minero viene disminuyendo en picada a tal punto que los montos
distribuidos para el 2014 (S/ 2,930 millones) resultan incluso menores a los
distribuidos en el 2009 y en el 2010 que fueron los años afectados por la
crisis financiera mundial que se desató en setiembre del 2008. En esos años las
transferencias llegaron a cifras equivalentes a los 3,434 y 3,089 millones de nuevos soles
respectivamente, a pesar del derrumbe de los precios del cobre en dichos años,
mientras el precio del oro siguió trepando.
¿POR QUÉ
SE CAE?
Esta
sensible disminución del canon minero que afecta seriamente las aspiraciones al
desarrollo y bienestar en las regiones mineras requiere una explicación que
sobrepasa las justificaciones oficiales e interesadas del gobierno, del lobista
ministro de energía y minas, y de la Sociedad Nacional de Minería, Energía y
Petróleo.
En
principio hemos afirmado sobre el “recorte del canon minero” puesto en práctica
por el gobierno del presidente Humala a partir del nuevo marco tributario
minero aplicado desde octubre del 2011 vigente a la fecha, el cual significó un
cambio sustancial en la determinación de la nueva regalía minera, con el
establecimiento del gravamen extraordinario para las empresas con contratos de
estabilidad tributario y el impuesto minero extraordinario aplicado a
las empresas mineras sin convenios de estabilidad tributaria.
En tal
sentido, las nuevas regalías mineras, el gravamen y el impuesto extraordinario
que sustituyeron al ansiado “impuesto a las sobreganancias mineras” de la
campaña electoral en la plataforma electoral del nacionalismo en el 2010, en
razón de su consideración de gasto tributario deducible significa una menor
recaudación del impuesto a la renta del sector minero, pues disminuye la
utilidad imponible para las empresas.
Sin
embargo, el abono trimestral del gravamen minero y del impuesto extraordinario minero
constituyen recursos que centraliza el ministerio de economía y finanzas (MEF),
donde el poderoso Luis Castilla hace y deshace, enajenando y disminuyendo en
última instancia las transferencias por concepto de canon minero para las
regiones y gobiernos locales.
Ello ha
significado que durante el 2013 los gobiernos regionales y locales dejen de
percibir 1,383 millones de nuevos soles por concepto de gravamen y el impuesto
extraordinario recaudado en el 2012. En el 2014 por tales conceptos le han
enajenado a los departamentos mineros la cifra de 1,146 millones de nuevos
soles cobrados en el 2013, los cuales se desdoblan en 337 millones por el
impuesto extraordinario y 809 millones por concepto del gravamen especial a la
minería.
Por tanto
las transferencias para los departamentos mineros han debido ser por ejemplo
para el 2013 de 3,817 millones de nuevos soles más los 1,383 millones
sustraídos a las regiones mineras por concepto de gravamen e impuesto
extraordinario minero abonados por el ejercicio 2012. Ello sumaría los 5,200
millones de nuevos soles que debieron ser transferidos a los gobiernos
regionales y locales al margen de los problemas en relación a la ejecución y
uso del canon minero.
En el
mismo sentido, para el 2014 en el período julio 2014 a junio del 2015 lo que el
gobierno ha debido transferir a las regiones mineras son los montos de 2,930
millones por concepto de canon minero más los 1,146 millones de nuevos soles
captados por el fisco en razón del gravamen y del impuesto extraordinario aplicado
y pagado por las empresas por ejercicio 2013.
Ello
hubiese significado distribuir aproximadamente 4,976 millones de nuevos soles y
no los mezquinos 2,930 millones por concepto de canon, lo cual constituye un
atentado para el desarrollo de los gobiernos locales y regionales.
LAS
REGIONES PERJUDICADAS
Si se
trata de cifras absolutas el canon minero distribuido para Ancash para el
período julio 2014/junio 2015 significa una “mochada” de 272 millones de nuevos soles, lo que
significa una disminución del 27.08 por ciento, a pesar que los precios promedio del zinc en el 2013 en relación al 2012
apenas se redujeron en un 1.85 por ciento y del cobre variaron negativamente en
un 7.8 por ciento.
Este
recorte, enajenación, sustracción, como quiera llamarse, del canon minero para los gobiernos locales,
regional y universidad pública de Ancash no debe justificarse con el mal uso y
la red criminal que se estableció en dicho departamento con licitaciones no transparentes, sobrecostos, malversaciones, etc, de
los recursos del canon, en razón que constituye una responsabilidad compartida
con el MEF, la Sunat, la Contraloría y otros organismos del estado.
El segundo
departamento que percibe los menores montos absolutos es La Libertad que
percibe 187 millones de nuevos soles menos en relación al canon minero del
2013, lo cual constituye una variación negativa del 34.31 por ciento como se
puede observar en el cuadro respectivo.
Si se
tiene presente que en dicho departamento operan importantes empresas auríferas
como Barrick Misquichilca con la unidad de Lagunas Norte, además de empresas
medianas como Horizonte, Poderosa, Retama, San Simón, Santa Rosa y otras, esta
reducción del canon resulta contradictoria con los precios del oro que
experimentaron una disminución promedio del 15.5 por ciento en el ejercicio
2013 en relación al 2012, como se podrá observar en el cuadro sobre la evolución de los precios de los
productos mineros.
El tercer
departamento que percibe los menores montos absolutos es Cajamarca que percibe
177 millones de nuevos soles menos en relación al canon minero del 2013, lo
cual constituye una variación negativa del 33.49 por ciento como se puede
observar en el cuadro respectivo.
Esta
fuerte disminución del canon minero cajamarquino que transita de los 528
millones en el 2013 a los 351 millones de nuevos soles se explicaría en parte
por la menor producción aurífera de la Mra. Yanacocha y el efecto combinado de
un menor precio promedio de la onza troy que pasó de 1,669 dólares a los 1,411
dólares en el 2013 con tendencia a la baja, con lo cual las perspectivas para
el próximo año serán más pesimistas en cuanto al canon.
El caso de
Cajamarca resulta particular pues al tratamiento tributario favorable y
permisivo con las empresas mineras, la disminución de la producción y de los
precios del metal amarillo se confronta con una oposición social en especial
campesina y de organizaciones ambientalistas a nuevos proyectos mineros que
podrían constituir una posibilidad positiva de desarrollo, con mayores
transferencias por canon, regalías, gravamen minero, con los efectos multiplicadores
en el empleo regional.
Por ello
no debiera causar extrañeza la celeridad en la detención y el abuso en la
persona del polémico presidente regional Gregorio Santos que por una absurda
maniobra del gobierno y del cuestionado poder judicial está siendo victimizado
y no resultaría extraño que sea reelegido en las próximas elecciones. Es decir,
de la cárcel a la presidencia regional gracias al abuso de poder.
El cuarto
departamento que percibe los menores montos absolutos es Puno que percibe casi
89 millones de nuevos soles menos en relación al canon minero del 2013, lo cual
constituye una variación negativa del 40.67 por ciento como se puede observar
en el cuadro respectivo.
A
diferencia de la mayoría de los departamentos que perciben menores montos por
canon minero por un conjunto de razones analizadas previamente, el caso de Puno
es especial pues allí los precios del estaño se han incrementado en lugar de
disminuir como sería el caso en los departamentos donde se extrae cobre, oro,
plata etc.
El precio
del estaño entre el 2012 al 2013 se ha incrementado de los 957.57 centavos la libra de estaño a
1,012.24, lo cual significa una variación del 5.7 por ciento con tendencia al
incremento tal como se podrá observar en el cuadro respectivo.
El caso
del estaño es significativo pues los precios promedio entre el 2012 al 2013 se
han incrementado en 54.67 centavos la libra, mientras el canon minero
distribuido para el departamento de Puno disminuye. Se debe tener presente que
allí opera el único productor de estaño
en el país, la empresa minera Minsur con la unidad de San Rafael del grupo
Brescia, que sigue obteniendo ganancias extraordinarias.
EPÍLOGO
La
evolución del canon minero del 2012 a la fecha constituye parafraseando a
García Márquez la “crónica de una muerte anunciada”, que debiera cuestionar el
patrón de acumulación primario exportador sin mayor valor agregado, altamente
dependiente de la demanda externa de nuestras materias primas.
Si a los
menores precios internacionales de los productos mineros se les suma el nuevo
marco tributario minero vigente desde octubre del 2011, la extrema codicia de
los grupos mineros, las mayores transferencias al exterior del excedente
económico generado en el país, el futuro del canon minero es hacia su
disminución.
A pesar de
la existencia de miles de millones de nuevos soles no ejecutados por concepto
de canon minero, y de los montos enajenados por gravamen y el impuesto
extraordinario captado por el MEF lo cual supone la existencia de importantes recursos
financieros que debieran servir de colchón, se impone una reingeniería y una
redistribución del canon minero ahora que se vienen las “vacas flacas”
En todo
caso, lo que está sucediendo con el canon demostraría la precariedad, la falta
de transparencia, altos niveles de corrupción y debilidad institucional del
gobierno central, regional y local que debieran superarse con una mayor
eficiencia, racionalidad y fiscalización insistiendo en las obras de impacto
regional, y el desarrollo de ventajas competitivas.
Es más, se impone una evaluación sobre los
efectos del canon en los últimos 10 años en el desarrollo, nivel de vida y
bienestar en la población de los gobiernos locales y regionales, y a nivel legislativo debiera
modificarse la distribución del canon al interior del departamento, pues
constituye mucho premio que un distrito donde opera la empresa minera se vea
favorecido con una participación del 10 por ciento y la provincia minera tenga
un acceso al 25 por ciento en la distribución de esta renta territorial.