martes, 21 de abril de 2015

UN 17 DE ABRIL HACE 48 AÑOS

DISCURSO DE ORDEN
XXIV PROMOCIÓN DEL CMLP

ESCRIBE: JORGE MANCO ZACONETTI ( Investigador UNMSM))

La generosidad del Presidente y amigo Ricardo Benavides general en retiro de la PNP, de la Junta Directiva que lo acompañan me han conferido el honor de realizar el Discurso de Orden en esta fecha tan importante en nuestras vidas.

En principio debo agradecer el encargo “sin dudas ni murmuraciones” prueba de ello estas líneas para recordar tan significativa fecha no sin antes felicitar a la Junta Directiva y a su presidente que han tenido y tienen el enorme trabajo de organizar, revivir, juntar, convocar a los diversos miembros de la Promoción XXIV, que como dicen algunos camaradas, es una gran sección.

Soy testigo de excepción de las múltiples llamadas para asistir a las diversas ceremonias y eventos organizados por la presente Junta Directiva, por ello en la medida de mis posibilidades, pues como investigador de UNMSM, consultor en el sector de energía y minas, periodista, y amante padre de familia era una obligación para mi estar en esta fecha.

En tal sentido, cómo olvidar la gran reunión del 13 de diciembre cuando cumplimos 45 años de egresados del CMLP donde asistimos más de 74 promocionales con nuestras respectivas parejas. Y asumo que todas estas reuniones tienen un sentido, el de prepararnos para las Bodas de Oro, en esta tercera juventud de nuestra existencia.

Esta reunión no es solamente para festejar a los cumpleañeros del mes de abril que es una práctica acertada, también es para felicitar a los diversos miembros que participan en los juegos deportivos que tienen como nombre a un reconocido deportista de la XXIV como Luis Arbulú, y sobre todo recordar, rememorar el primer día de nuestro ingreso a nuestro querido Colegio Militar.

Como testimonio personal debo recordar que antes de ingresar el 17 de Abril de 1967, habíamos pasado por un examen de admisión, donde la prueba se tomaba en lo que es el comedor del colegio. Por tanto, con 13, 14 o 15 años teníamos que dar un examen de rigor donde decenas de postulantes fueron rechazados, pues postulamos más de 2,500 e ingresamos un poco más o menos de 450.

Si la memoria no me falla, pues la memoria “es como las amantes… ingrata” fuimos los ingresantes los que adquirimos la condición de perros a partir de esa fecha, y egresamos menos de 340 que pasamos por el tercer, cuarto y quinto año, es decir pasamos por el reino animal de la modesta condición de perros, medianos chivos a vacas sagradas.

Por ello, permítaseme recordar con un minuto de silencio a todos los compañeros que ya no están físicamente con nosotros pero que nos acompañarán hasta el fin de nuestros días.

¡Muchas gracias!

Con la estadística de nuestro presidente son cerca de los 50 ex cadetes promocionales que están en el reino celestial, si a ello se suman los camaradas que radican en el extranjero y en el interior del país, a todos ellos nuestro reconocimiento deseándoles el mayor de los éxitos y bienestar familiar.


UNA FECHA MEMORABLE

1967 es un año interesante, el equipo Universitario de Deportes fue campeón del fútbol peruano y Lucho Cruzado fue reconocido como el mejor jugador del campeonato. Por si acaso no soy de la “U”

A nivel político el gobierno del arquitecto Fernando Belaúnde Terry se debatía en una grave crisis de gobernabilidad, con altos niveles de corrupción con una fuerte oposición a nivel parlamentario, como ahora, pues la alianza APRA/UNO del general Odría tenía mayoría congresal y al año siguiente se interpelaría a un Gabinete que solamente duraría 24 horas pues tal era la crisis que los militares con el general Juan Velasco Alvarado se vieron obligados a establecer el Golpe Militar del 3 de Octubre del 1968 ante el escándalo de la Página Once, por el asunto de la Brea y Pariñas con la IPC.

A la crisis política se sumaba la crisis económica con las primeras devaluaciones del sol frente al dólar con el incremento de los precios que afectaban a las clases medias en especial.

A nivel internacional se agudizaba el conflicto  del Medio Oriente  que llegaría a su clímax  entre el 5 al 11 de junio de 1967 con la Guerra de los 6 días entre Israel y los países árabes; y el general De Gaulle presidente de Francia exigía a los Estados Unidos el cumplimiento de la libre convertibilidad del oro pues se asumía que una onza de oro era igual a 33 dólares americanos, como lo establecía el acuerdo de Bretton Woods de 1944.

En ese contexto el lunes 17 de abril en la mañana con nuestros utensilios más elementales nos dirigimos al CMLP acompañados por nuestros padres y familiares, pues estaríamos internados hasta el Día de la Madre, que se celebra el segundo domingo del mes de mayo.

Los días de internamiento fueron utilizados para cambiar nuestra situación de jóvenes pelucones de la nueva ola, aficionados a los Beatles, Los Iracundos, Los Saicos a la estricta vida militar. 

¡Cuádrese Cadete! ¡Angulo recto carajo! ¡Saca pecho! ¡Paso ligero! ¡Uno, dos, tres! ¡Los tres últimos están castigados! Fueron parte de las palabras y los nuevos códigos.

En verdad, para un muchacho de 13 o 14 años la vida de internado en un colegio militarizado tiene fundamental importancia resulta una experiencia que te marca la vida

En especial en el primer año, donde prácticamente sobreviven los más fuertes ante una serie de experiencias, golpes en el pecho, ranas, ángulos rectos, insulsas marchas y contramarchas, en fin prácticas de la vida militar donde los cadetes de quinto y cuarto año, se desquitaban  a su vez de los abusos heredados del pasado; acciones todas propias de la vida militar bajo el supuesto de la formación del carácter.

¿Cómo olvidar el Bautizo al que fuimos sometidos? Me acuerdo que en las primeras semanas, después de almorzar, salían los cadetes de quinto año, luego los de cuarto y por último nosotros.

Cuando veo en TV. Mundo Salvaje en África, cuando los leones cazan a las manadas de cebras, o antílopes, así también éramos nosotros cazados por los cadetes de cuarto o quinto año. Por ello si no querías tender camas, lustrar botines, encerar pisos entre otros, teníamos que correr a la mayor velocidad posible, como en las sábanas africanas.

En tal sentido, lo primero que debo agradecer al CMLP en ese objetivo de “hacerse hombrecito” es el valerse por si mismo, pues ya no tienes a los padres, hermanos mayores o amigos del barrio que salgan en tu defensa. Esta experiencia formativa te prepara para la dura vida, donde el éxito o fracaso depende del esfuerzo personal, inteligencia, viveza en el buen sentido de la palabra.

DISCIPLINA, MORALIDAD. TRABAJO no son simples palabras. Son valores que nos han convertido en ciudadanos, en personas de bien, en amantes del Perú sobre todas las cosas. Capaces del desprendimiento y sacrificio de nuestro referente Leoncio Prado Gutiérrez después de la tragedia de Huamachuco, batalla que se pudo ganar si no fuera por la falta de municiones y de apoyo de otros jefes peruanos que mezquinaron soldados, vituallas y armas a nuestra Mariscal Andrés Avelino Cáceres.

¿Qué le escribía nuestro héroe a su padre Mariano Ignacio Prado, en una misiva del 15 de julio de 1883 horas antes de morir fusilado?: “Queridísimo padre: Estoy herido y prisionero, y hoy a las ocho y media debo ser fusilado por el delito de haber defendido a mi Patria”


Han pasado 48 años y está en nuestras retinas cómo de civiles, jóvenes de los diversos barrios de Lima, de los diversos estratos sociales y con provincianos de todo el Perú nos convertimos en cadetes, donde la disciplina en nuestros actos, la moralidad, el trabajo se convirtieron en los principios rectores de nuestras vidas.


El CMLP era ya un colegio posicionado con prestigio bien ganado. Somos la XXIV promoción  por tanto hay XXIII promociones que nos antecedían, pues era y es un privilegio haber estudiado en sus aulas.

Nuestro único premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa con sus obras “La Ciudad y los Perros”, y en su Memorias “El Pez en el Agua” ha convertido a nuestro colegio en una institución reconocida a nivel internacional. Es más, está agradecido con el CMLP pues reconoce que su vocación de escritor se forjó en sus aulas, en los dos años que como cadete de tercer y cuarto año estuvo internado.

Al igual que Vargas Llosa cada uno de nosotros reconoce una deuda imposible de pagar con nuestro querido colegio. Sea por la calidad de enseñanza. Sea por los amigos que se cultivaron allí, sea por los principios que nos inculcaron, o por todo ello.

En lo personal a pesar del tiempo transcurrido asumo una deuda, un reconocimiento  hacia el CMLP que me acompañará hasta el fin de nuestros días, un orgullo por esos tres años que nos han hecho hermanos para siempre.

Por todo ello muchas gracias por su atención.

Para terminar quiero que me acompañen con tres vivas.

¡Viva la XXIV Promoción!
¡Viva el CMLP!
¡Viva el Perú Carajo!

viernes, 10 de abril de 2015

MINAS BUENAVENTURA CON SAN MARCOS

POR UNA ALIANZA UNIVERSIDAD/ EMPRESA


ESCRIBE: JORGE MANCO ZACONETTI (Investigador UNMSM)

En el marco de las celebraciones por el 140º aniversario de la creación de la facultad de Ciencias Económicas de la UNMSM en el día central 7 de Abril, ante un lleno de autoridades, docentes y estudiantes en el Salón de Grados de nuestra facultad, se inauguró el año académico, con las palabras del señor decano.

La exposición magistral estuvo a cargo del Ing. Roque Benavides Ganoza, Presidente Ejecutivo de la Compañía de Minas Buenaventura S.A.A., una de las empresas mineras líderes a nivel mundial en la producción de oro y plata que genera empleo a más de 30 mil peruanos, con sus participaciones en otras empresas mineras, y que cotiza en la exigente Bolsa de New York.

No ha sido la primera vez que el Ing. Benavides visita los claustros sanmarquinos lo que pone en evidencia los renovados cambios que se están materializando en la vieja universidad donde existe el interés de escuchar a los representantes empresariales de los distintos sectores de la economía peruana.

Su interesante y polémica presentación ¿Qué Hacer para asegurar el Crecimiento Económico del Perú en los próximos años? constituye una visión de parte sobre los problemas y posibilidades que tiene nuestro país para superar los indicadores macroeconómicos que ubican al Perú como un país de ingresos medios detrás de Chile, Argentina, Brasil, Colombia, Venezuela.

En una exposición amena matizada de anécdotas personales de un empresario exitoso que como él mismo lo afirma tiene la preocupación de visitar las universidades privadas y públicas como San Marcos para comunicar a los jóvenes la importancia económica y social que tienen las actividades extractivas como la minería para nuestro país. Tarea urgente y necesaria ahora que existen cuestionamientos políticos a importantes proyectos mineros.

De otro lado la cálida recepción en la facultad de economía demuestra  el interés de dialogar, intercambiar información y experiencias tendiendo los puentes necesarios en el marco de un proyecto nacional de desarrollo, donde la academia y el empresariado moderno juntos asuman un rol central para alcanzar el círculo virtuoso del desarrollo.

Está demostrada por la experiencia europea y norteamericana la sinergia existente entre las universidades más prestigiosas y las grandes empresas que financian las investigaciones científicas en las ciencias naturales y sociales. Por el contrario, en nuestro país en particular San Marcos se desenvuelve realizando importantes investigaciones pero desconectada de las necesidades empresariales.

En América Latina Brasil, Chile y Cuba serían los países donde las universidades públicas tienen un rol relevante en el desarrollo de sus países el cual es estimado por su participación en las inversiones para la investigación en ciencia y tecnología en relación a su producto bruto interno en niveles que superan al resto de países de nuestro hemisferio.

En tal sentido, todas las empresas mineras realizan en la etapa de exploración la necesaria investigación para encontrar las necesarias reservas mineras que justifiquen las inversiones para transitar a las actividades de explotación. Se trata de monetizar los importantes recursos mineros y energéticos con el mayor valor de retorno para capitalizar el país.

En la presente coyuntura donde se manifiesta una interesada oposición ideológica a importantes proyectos mineros como Tía María, Minas Conga, Michiquillay, La Granja y otros es necesario resaltar que de un total territorial de 128 millones de hectáreas, las diferentes fases de la actividad minera como la exploración, explotación, cateo y prospección, construcción, cierre  y plantas de beneficio ocupan apenas el 1.23 por ciento del total, tal como se expone en el cuadro respectivo.

Como lo mencionó en su exposición todas las empresas mineras que operan en el país hacen exploraciones que en su esencia constituyen investigaciones y las investigaciones constituyen el ser de la universidad, cuyo sentido es la búsqueda y la difusión del conocimiento científico.

En tal contexto existiría un punto de encuentro e interés mutuo por fortalecer entre la universidad y la empresa que debiera aprovecharse para beneficio mutuo, donde los centros académicos con potenciados laboratorios de física y química podrían prestar servicios a las empresas en especial a las medianas y pequeñas empresas mineras. Las facultades de ingeniería electrónica podrían construir los diversos programas informáticos que demanden las empresas etc.

No solamente se trata de formar cuadros profesionales como geólogos, ingenieros de minas entre otros, que tienen cierta cotización en el mercado, se trata de articular los intereses de las empresas con la universidad pública en el mediano y largo plazo.

El empresariado moderno en nuestro país debe reconocer que la universidad pública tiene un rol central en el desarrollo económico de nuestros países, por ello resulta positivo reconocer la necesidad de convertir a la universidad de San Marcos en un foro y faro, donde las diversas ideologías expresen su pensamiento en libertad pues como diría el viejo Mao Tse Tung: “Que florezcan cien flores que nazcan cien escuelas”

En particular llamó la atención el énfasis de la afirmación entre la minería y el agua, cuando señaló los millones de metros cúbicos de agua que se pierden en la mar, sea en la vertiente oriental como en la del Océano Pacífico, poniendo de manifiesto que nuestro problema no es la falta de agua sino su preservación, y la calidad de la misma por la ausencia de infraestructura en nuestro país, en especial en el tratamiento de las aguas servidas y de inversiones en el saneamiento.

Por ello, señalaba que “la minería debe sembrar agua” a través de la construcción masiva de represas en los pisos alto andinos,  que puedan guardan el recurso hídrico en los tiempos de lluvias para el servicio de la agricultura y ganadería en las épocas de sequía. Ello es posible en una alianza estratégica entre el estado central, regional, local y las empresas mineras, donde un mecanismo posible de financiamiento es el denominado proceso de  “obras por impuestos” y las inversiones por concepto de responsabilidad social empresarial.

En particular en su disertación llamó la atención las diferencias existentes entre Chile y Perú no solamente en el ámbito minero donde el vecino ocupa el primer lugar en la producción mundial de cobre con niveles superiores a los 5 millones de toneladas anuales donde la  estatal Corporación Chilena del Cobre (Codelco) ocupa el liderazgo en la producción del metal rojo, a pesar que nuestro país tiene un potencial superior que debiera ser capitalizado con responsabilidad social y ambiental.

En ese sentido, resaltaron las diferencias en la institucionalidad y estabilidad política que nuestro vecino del sur tiene en relación al Perú, lo cual lo convierte en un foco superior de atracción de la inversión minera en relación a nuestro país. Si bien aquí los costos de producción pudieran ser menores los capitales se van para Chile como dice la canción.

Por último, los asistentes tomaron nota de la importancia  del sector minero en la economía del país. Con la estimación del PBI a los precios del 2007 la participación del 14.4 por ciento resulta relevante en una actividad que se desenvuelve en 15 regiones del país.

En términos de  Marx con sus esquemas de reproducción ampliada la minería sería algo así como el sector I de la economía peruana que genera el 57 por ciento de las divisas que requiere el país a través de las exportaciones, divisas con las cuales se compran alimentos, maquinaria, bienes e insumos.

Es decir, la actividad minera es fundamental para la producción y reproducción de la economía peruana con todos sus problemas, pues es algo así como la “vaca lechera” por los ingresos directos e indirectos que se derivan. De allí, la necesidad de promover las inversiones con responsabilidad y al mismo tiempo el fomento de una mayor relación entre la universidad pública y las empresas privadas.




lunes, 6 de abril de 2015

CONFLICTOS SOCIALES Y ESQUIZOFRENIA MINERA

DESTRABANDO INVERSIONES CON RESPONSABILIDAD SOCIAL

ESCRIBE: JORGE MANCO ZACONETTI (Investigador UNMSM)

Asumiendo por esquizofrenia el sentido literal de “fraccionamiento mental” trato de entender la naturaleza de los conflictos sociales en el Perú que traban las inversiones en el sector minero energético, ante la inopia e incapacidad del Estado. Por un lado, los gobiernos locales y regionales demandan al Estado mayores recursos por concepto de canon, regalías mineras e inversiones públicas; de otro lado, importantes sectores de la población se oponen por razones ambientales e ideología a las inversiones mineras, sea el caso de Tía María, Minas Conga, La Granja, Michiquillay, Rio Blanco, Los Chancas, por mencionar los más relevantes.

Si bien, por muy importantes que sean estas inversiones se requieren los necesarios consensos sociales, el diálogo entre las partes involucradas que no es solamente un problema entre las empresas y las poblaciones, sino básicamente del Estado (central, regional, local) ante la ausencia de una política de Estado en el largo plazo, que prevenga, administre y solucione los conflictos sociales, pues en democracia las inversiones no se pueden imponer a “sangre y fuego”

Como investigador no tengo dudas sobre la naturaleza del crecimiento económico que ha experimentado nuestro país entre el 2002 al 2013, con excepción del bajón del 2009. Este crecimiento perverso, desigual, asimétrico pero crecimiento al fin y al cabo ha sido inducido por el sector exportador básicamente minero energético, de productos mineros como el cobre y oro, e hidrocarburos (petróleo pesado y gas natural), en razón de la demanda internacional en especial de la economía china, y los altos precios de las materias primas.

Es más, la presencia de capitales chinos en el Perú es relevante pues no solamente están en la producción de hierro a través de la empresa Shougang Hierro Perú sino también en el proyecto  Toromocho que entró en operaciones hacia fines del 2013 donde en sus dos etapas ha comprometido inversiones superiores a los US $ 4,820 millones de dólares; es más se espera que en el 2016 inicie sus operaciones el proyecto Las Bambas en la región de Apurímac con inversiones declaradas superiores a los US $ 10,000 millones, las cuales deberían ser seriamente verificadas.

Es decir, la economía china no solamente demanda a la economía mundial materias primas sino que también establece bases en nuestro país convirtiéndose en el único productor de hierro con más de 10 millones de toneladas anuales y a partir del 2016 será el principal productor de cobre con la producción conjunta de Las Bambas y Toromocho, con una producción estimada sobre los 700 mil toneladas anuales cuando ambos proyectos alcancen la plenitud de sus operaciones.

Si a ello se suma las inversiones y la presencia del Estado chino en el subsector de hidrocarburos con los lotes gasíferos del 58 y participación en el lote 57 en el ámbito del Gran Camisea más los lotes X, VI/VII en Piura y en el lote 8 en la selva nororiental, prácticamente los capitales estatales chinos explican los mayores volúmenes en la producción de crudo y tienen un gran potencial en el gas natural que evidentemente exportarán a la vieja China.

La referencia a las empresas chinas no es casual pues se trata del “gigante asiático” que está destinado a ser el centro hegemónico de la economía mundial para mediados del presente siglo. Donde las inversiones a través de sus diversas empresas estatales y privadas incorporan en los altos cargos a miembros del Partido Comunista Chino que cuenta con casi 100 millones de inscriptos.

Es decir, en el país asiático y en el exterior los camaradas chinos promueven las inversiones extractivas y en nuestro país nos damos el lujo de entramparlas con un discurso ambientalista que imposibilita toda inversión en las llamadas nacientes de cuenca, cuando el recurso hídrico puede ser manejado racionalmente, con la aplicación de la ciencia y tecnología.

He mencionado estos dos proyectos cupríferos por su viabilidad económica y social asentados en los Andes, Toromocho (Junín) en la región central con una vieja tradición minera donde los conflictos corresponden a una naturaleza redistributiva con el traslado de las poblaciones del campamento Morococha, demanda de empleo a la compañía minera o con sus trabajadores con su naciente sindicato que demanda mejoras salariales y superiores condiciones de trabajo.

En el caso de Las Bambas en un departamento como Apurímac la gran minería recién se iniciaría con dicho proyecto en una región esencialmente agrícola y ganadera. Por ello cabe preguntarse ¿qué hizo la anterior administración de Glencore/Xstrata para obtener la aceptación de las comunidades campesinas?

Hubo un trabajo de sensibilidad social sobre las ventajas y posibilidades de la actividad minera con el bienestar comunal. Se realizaron importantes inversiones sociales antes de iniciar la construcción física del proyecto. Se demostró la viabilidad ambiental del proyecto en el largo plazo con la actividad agrícola comunal, respetando los principios de reciprocidad, pisos ecológicos y redistribución andina.

Se invitaron a líderes campesinos a conocer las operaciones mineras en otros países. Se asumió el compromiso de emplear a los hijos de la comunidad, enviando a los mejores a estudiar en universidades norteamericanas. Es decir, hubo un compromiso de desarrollo conjunto entre la empresa minera y las comunidades campesinas reconociendo la capacidad de adaptación e importancia de las mismas.
De otro lado, no es posible desconocer el lado oscuro de la actividad minera con los pasivos mineros heredados del pasado reciente y lejano ante la indiferencia e incapacidad del Estado. Si a ello se agregan los altos niveles de contaminación provocados por las actividades mineras sobre todo informales e ilegales, la debilidad del Estado en la regulación ambiental, y en la solución de los conflictos sociales en razón de las actividades extractivas, podemos entender la desconfianza y oposición de amplios sectores de la población a las inversiones mineras/ energéticas.

CONFLICTOS E INVERSIONES

Revisando el Reporte de Conflictos Sociales Nº 132 publicado por la Defensoría del Pueblo correspondiente al mes de febrero del 2015 se contabilizan 211 conflictos sociales de los cuales 142 han sido identificados como conflictos socioambientales, de los cuales 95 casos corresponden a las actividades mineras, 23 a las actividades de hidrocarburos y 9 casos se ubican en el ámbito del sector energético.

Es decir, las inversiones y el comportamiento minero energético explica a febrero 127 casos de un total de 142 conflictos socioambientales y latentes al mes de febrero del presente y todo hace pensar que los mismos se incrementarán por las demandas propias del proceso electoral donde las expectativas políticas de las poblaciones locales se exacerban por medio de frentes de defensa y liderazgos regionales que cuestionan el conjunto de las inversiones extractivas.

Sin embargo, no podemos desconocer e ignorar la relación directa entre el crecimiento económico de nuestro país y las masivas inversiones mineras que pasaron de 22 millones de dólares a inicios de los años noventa del siglo pasado alcanzando los US$ 9,719 millones en el 2013 y US$ 8,643 millones en el 2014, pero que se reducirán sustantivamente a partir del 2018 en la medida del entrampamiento de las inversiones, sea por los bajos precios de los minerales, la falta de financiamiento, los conflictos sociales y las llamadas limitaciones ambientales.

Debiera existir consenso social para fomentar las inversiones en general y mineras/ energéticas en particular si se pretende asegurar el crecimiento económico del PBI, en especial si se quiere alcanzar el 5 por ciento anual de crecimiento del PBI, pues todo hace pensar que el crecimiento para el presente año será igual de mediocre utilizando las palabras del ministro de economía y finanzas, con cifras menores al 3 por ciento anual, y este menor crecimiento afectará con mayor fuerza a los más pobres.

Como economistas debemos reconocer la relación directa entre las inversiones mineras y el crecimiento del PBI pues es una verdad estadística que una inversión de US$ 4,000 millones explica casi un punto de crecimiento del PBI, por tanto cabe interrogarse sobre las razones reales y aparentes que traban las inversiones y el costo social del excedente económico dejado de percibir por el Estado, los trabajadores sin empleo, la afectación a la economía campesina, y las compras no realizadas a la industria local y nacional.

¿Cuántos hospitales, caminos y colegios no se construirán en razón de los recursos, del excedente potencial no percibido por el estado central, regional y local?

Alguna universidad, centro de investigación u ONG ha estimado ¿cuál ha sido el ingreso dejado de percibir directamente e indirectamente por las inversiones no realizadas y su posible impacto en la economía regional? Alguna institución ha calculado ¿cuántos jóvenes trabajadores egresados de las universidades y centros tecnológicos se encuentran subempleados por el entrampamiento de las inversiones minero/energético?

Toda inversión supone una demanda de bienes y servicios que dinamizan el conjunto de la economía local, regional y nacional. Seguramente existen “externalidades negativas” es decir aspectos negativos que puedan afectar a determinados sectores que deben ser reconocidos e indemnizados si fuera el caso, pero en conjunto los aspectos benéficos de las inversiones superan las perversidades de las mismas.

El Estado no solamente percibe el impuesto a la renta que constituye la base del canon minero que dicho sea de paso tiende a disminuir en razón de los menores precios internacionales, con una disminución de los ingresos y utilidades, una realidad agravada con un permisivo marco tributario con la nueva regalía minera, del impuesto y gravamen especial aplicado desde el último trimestre del 2011 a la fecha.

El Estado percibe los impuestos por la importación de maquinaria y equipo (aranceles) adicional al impuesto selectivo al consumo de combustibles e importaciones. Es decir, nos guste o no las inversiones mineras tienen un efecto dinámico, multiplicador, expansivo al conjunto de la economía, y si queremos asegurar el crecimiento económico para los próximos años tenemos que alcanzar los necesarios consensos sociales para viabilizar y destrabar importantes inversiones en el sector minero energético.

Siempre he asumido que las actividades mineras/energéticas constituyen una posibilidad de desarrollo para las poblaciones campesinas y regionales sea directa o indirectamente, desde una valoración equitativa de los derechos de servidumbre hasta el empleo directo, al margen de los recursos distribuidos por concepto de canon, regalías y derechos de vigencia mineros que debieran ser ejecutados con transparencia para superar los niveles de corrupción que constituyen una rémora para el desarrollo.


Ahora que los precios de los minerales han disminuido es urgente y necesario promover con responsabilidad social, ambiental y tributaria las inversiones minero/energético, si queremos apuntalar el crecimiento, tener los recursos fiscales para la inclusión social y la lucha contra la pobreza.